Maya
(Fragmento)
Sueña mi amor,
con días de luz…
Sueña con
felicidad.
Cierra tus
ojos, duérmete ya.
Al despertar,
ahí estaré…
—¿Mami?
—Pregunta desconcertada la niña al asomarse por la ventana de su cuarto— ¿Mami,
qué haces ahí abajo a estas horas?
—Tendrías que bajar para ver, mi amor…
—¿Hay algo
bonito ahí mami?
—Claro. Las estrellas… vamos a verlas mi
cielo…
—Pero hace
mucho frío mami, y es tarde.
—Tú tienes que venir… esto es algo
maravilloso…
—Pero tengo
sueño mami… Otro día…
—Tú vas a venir ahora…
Algo tarde, la
niña se da cuenta del engaño: una llorona ha confundido sus sentidos para
conseguir que al menos abriera la ventana. Ahora que lo ha conseguido, el
espectro maldito se mueve con la velocidad de una ráfaga de viento hasta el
marco de la ventana del cuarto de la niña, la sujeta por el pecho del camisón y
se la lleva flotando.
La pequeña
grita aterrada al simple contacto del espectro y chilla desesperada al ver
alejarse la tierra firme y su hogar a sus pies. Llama a su verdadera madre, a
su padre y a su hermano que duermen en las otras habitaciones de la casa.
Todos se
despiertan con un sobresalto. La madre y el hermano, enfermera y paramédico de
profesión, reaccionan con mayor rapidez, pero desgraciadamente llegan tarde
para impedir el secuestro.
La madre,
aterrorizada, baja las escaleras de casa, sale al jardín y corre, descalza y en
camisón, intentando desesperadamente alcanzar al fantasma que se lleva a su
hija, o al menos no perderlas de vista. Pero el fantasma, aún cargado y
planeando bajo, se desliza por el aire mucho más rápido que ella. En un par de
minutos ya se ha alejado demasiados metros y un poco más tarde, hasta los
gritos de la niña han sido ahogados por el viento frío de la madrugada, Finalmente
la madre pierde las fuerzas para correr y conmocionada se deja caer de rodillas
con la mirada fija en el minúsculo punto blanco en la lejanía.
Su esposo y su
hijo la alcanzan no mucho después, pero el punto blanco ha desaparecido...
Acepto preguntas, comentarios, lo que sea.
En cualquier caso, dado el hecho de que tengo problemas para contactar con el amigo que se supone va a ayudarme a editar y que además sólo gozo de un par de horas frente a la computadora para trabajar (y eso, en las noches, con interrupciones), todavía veo algo para largo lo de compartirles el enlace con fondeadora... Con decir que aún no tengo ni el video...
Y para colmo, tampoco trabajo. Pero andamos en eso. No se preocupen, que haré lo mejor que pueda para sacar el proyecto este año, aunque me tarde un poco con las fechas...
Les deseo buenas noches, recuerden que lo quiero mucho y les deseo que sean felices.
P.D. En próximas fechas subiré el cuento de tlaloques llamado "Anna" con el cual participé en el concurso Caligrama 2010 (creo). No pasé ni de etapa, pero lo dedico a mi hijo y es un cuento que me hace sentir orgullosa.
Besos y buenas noches